La Terminal de Contenedores de Moín se encuentra prácticamente lista para su inauguración en Febrero de 2019. Al 20 de Diciembre de 2018 están llegando, y partiendo, 2 barcos por semana. Esto ha permitido afinar los sistemas, protocolos y procedimientos para pasar a la fase de la operación. Faltan detalles entre los que se incluyen un pequeño dragado de mantenimiento, la demarcación de las vías adentro de la terminal, conclusión del adoquinado (falta reemplazar adoquines defectuosos y barrer el polvo acumulado), instalación final del cableado eléctrico de alta tensión y arranque de la subestación eléctrica.
Desde el punto de vista ambiental el énfasis en este período ha sido la protección de la playa de Moín, en el lado interno de la Bahía, y la limpieza de rocas y plásticos (mucho no provenientes del proyecto) en el lado noroeste. También en el proceso de desmovilización de áreas asegurando que los sitios que se entregan al Estado estén en buenas condiciones.
En este período, y siguiendo el plan de manejo adaptativo se colocaron medidas temporales para la protección de la playa. Específicamente, se instalaron 225 geo-sacos de forma longitudinal a la playa y se movilizaron 40 mil metros cúbicos de arena desde el interior de la bahía (frente al Centro Ambiental CCT). Estas obras pretenden aminorar el efecto del oleaje que se espera para los meses de diciembre de 2018 y enero de 2019, como es usual en esa época del año. En el mes de enero de 2019 se espera además tener el diseño final y cronograma de las obras permanentes para la protección de la playa.
La limpieza de la playa en el sector norte de la TCM está muy avanzada e incluso ha incluido un área mayor a la recomendada por la regencia. Esto ha incluido tanto piedras como desechos plásticos. Las observaciones de los regentes en este sitio revelan que el trabajo está avanzando significativamente y se espera terminar al inicio del año 2019. En este punto debe encontrarse un balance entre protección de la línea de costa y otros factores ambientales. Las rocas que se encuentran en los primeros 500 metros, adyacentes a la terminal realizan una importante función "sosteniendo" la playa y protegiéndola.
La regencia realizó una visita al Consejo Nacional de Concesiones el 6 de diciembre de 2018 y presentó el estatus del plan de gestión ambiental: ha sido implementado de acuerdo a lo programado y algunas actividades deberán ejecutarse en etapa de operación. Por ejemplo, tanto el Rancho como el Centro de Visitantes deberán ejecutarse en 2019 debido a que todavía no hay claridad en cuanto al sitio final donde se construirían ambos. Igualmente, el último monitoreo de mamíferos marinos se hará una vez que el proyecto esté en etapa de operación, según indica el PGA.
Tanto la regencia, como el Desarrollador y sus subcontratistas están haciendo esfuerzos para asegurar que las no conformidades sean atendidas adecuadamente. En todos los casos se están coordinando las actividades de desmovilización para que los problemas detectados sean resueltos antes del 28 de febrero de 2019. Por esta razón el equipo de regencia está implementando un plan de cierre, junto con el desarrollador, que implica la "devolución" de áreas, el monitoreo de variables ambientales y el seguimiento de asuntos pendientes. Al mismo tiempo se están preparando informes consolidados para temas específicos, que resuman los resultados de estos cuatro años de monitoreo. Estos serán presentados en los próximos IRAs.